Hemos avanzado mucho desde la última vez que actualicé el post, tanto, tanto, que se podría decir que ya la he acabado, y es que era este aspecto el que últimamente me tenía quemado, el no acabar nada, especialmente con este modelo que ya tuve que empezar de nuevo, y que a punto ha estado de sufrir un nuevo baño (por no decir un salto por la ventana, y eso que vivo en un 11). Pero haciendo de tripas corazón he decidido acabarlo a pesar de la aparición de algunos cráteres que no he sido capaz de eliminar totalmente, y así poder pasar a otras cosas…
Lo primero desde donde lo dejé era pintar de nuevo la carrocería en blanco:
Y luego enmascarar para el azul:
Y aquí la cagada, ya que coloqué la cinta de enmascarar para los dorsales por fuera, y el caso es que no me di cuenta hasta que tocó colocarlos. ¡¡Mierda seca!!
Toca enmascarar la zona e intentar disimularlo:
Lo dejamos por el momento para pasar a otros detalles que intentarán mejorar el exterior.
Para los faros traseros, al final decidí clonar los del Stratos de Hasegawa, para que contasen con el relieve del faro que mi primera prueba a partir del faro hecho en resina no tiene:
Y también cambio las bases de metal del kit por unas nuevas a partir de círculos de plástico:
Momento de evolucionar la parrilla de faros delantera, aprovechando que tenía un microporo que me estaba poniendo de los nervios y que decidí eliminar, enmasillando y pintando de nuevo. Usando los anclajes que vienen en el set de fotograbados de Hobby Design para el Fiesta, los uso para “sujetar” los focos de la parrilla del Stratos:
He tenido que meter unos tornillos de fotograbado por dentro para dar cierta separación a las bases respecto de la propia parrilla:
Y también por fuera para simular los tornillos de sujeción / regulación:
Parrilla completa:
También completos los faros traseros (en vivo si que se diferencia entre el rojo y el naranja). Bajo mi punto de vista, una gran mejora respecto de la opción del kit:
Otros detalles, como los cierres de capó traseros, con las bases hechas con trozos de lata y una varilla de 0,4mm. ¡Hasta basculan de verdad!
También con lata, he hecho las bases de las matrículas y de la placa del rally. En el caso de la trasera, el marquito lo he completado con tirillas de plástico, enmasillando los bordes:
A partir de las mismas bases clonadas de los faros supletorios, voy a intentar recrear las bases de los supletorios inferiores, pero que estaban vacíos, sin ópticas. La forma de anclarlas no es 100% la real, pero me gusta como queda:
Volvemos a la carrocería. La verdad es que durante todo el tiempo transcurrido entre tanto detalle, está el trabajo típico después de lacar de quitar motitas puliendo, pero en mi caso volvieron a aparecer algunos cráteres después de la segunda mano (la primera fue demasiado fina y entre medias lijé para una segunda capa), aunque no tantos como la primera.
Después de mucho pulir, llegó ese momento crítico en el que o la acababa, aunque tuviese algún defecto en la carrocería, o probaba su capacidad de vuelo. Me decidí por la primera opción, así que paso a ese trabajo oscuro de trabajar la parte interior de la carrocería:
Tras el pintado de marcos (a mano, por ahora el enmascarado de los mismos no me da buen resultado), empieza el montaje del puzzle. Este modelo en metal acojona en este aspecto, ya que los encajes, por mucho que los hayas trabajado al comienzo, a veces no concuerdan en esta fase. Además, el peso de algunas piezas no ayuda demasiado. Cruzo los dedos:
¡¡Qué sufrimiento!! Los acetatos por suerte no son demasiado malos, y presentan una transparencia aceptable. Lo peor, como se ve en la foto, ha sido adaptar la calca pensada para el cristal de la maqueta de Hasegawa, mucho más estrecho. Tuve que pintar la base en blanco, cortar los logos, y luego barnizar, con el riesgo que conlleva manipular un transparente, y encima en acetato. El resultado no me ha dejado satisfecho 100%, ya que no debería de quedar borde blanco por arriba ni por abajo, pero si no la hice volar antes…
Mientras dejo que seque el ciano, evolución para el escape. No sé si el de Bragation lo llevaba, pero lo vi en una foto y me gustó para dar vistosidad a la parte trasera.
Las argollas las he hecho con cable de soldar de Aber de 0.2mm, y los muelles son, si la memoria no me falla, los de Turner Model para motos.
Montado en su sitio, junto con otras piezas que completarán la parte baja, como son los cubrecarteres. También se pueden ver los clips de anclaje del capó trasero, por donde se supone que podría bascular a la hora de abrirlo:
Antes de poner las ruedas para poder darle la vuelta, hay que colocar las faldillas. El problema que tuve para buscarlas es que eran de color blanco, y semitransparentes. Después de mucho buscar (incluso por los suelos), una cajetilla blanda de plástico de Winston fue la solución. Unos remachitos de fotograbado completan la sujeción a la carrocería:
Las cuatro faldillas puestas, así que momento de pegar las primeras ruedas. Sólo espero que al darle la vuelta, todos los ajustes iniciales den su fruto y no cojee.
¡¡Bien, apoya dignamente!!
Momento de colocar todos esos detalles, alerones, tomas de techo, etc., e incorporar algunos más.
Revisando las fotos, he cambiado el retrovisor exterior, empleando uno más cuadrado, que era el que montaba el coche en el rally. Por puro vicio, le he incluido los tornillos de anclaje a la carrocería:
Y unos cables para la conexión de los faros supletorios inferiores:
Todo montado…
… pero no acabado. Le voy a poner unas pletinas de sujeción para los faros, y prepararé otro par para la parrilla central que, tras la enésima revisión de las fotos, he visto montaba:
La peana, eso si, ya la he preparado:
Perdón por el tocho. Se ha alargado la cosa.
En breve, algunas fotos con luz natural ya en la parte de terminados.
Gracias por la paciencia al que se haya tragado este último post.