El 4½ L. fue un coche de competición construido por Bentley entre 1927 y 1931. Famoso por su declaración "There's no replacement for displacement", Walter Owen Bentley aumentó la cilindrada de su modelo 3 L. dando origen al 4½ L. Antes de que Bentley cediera el control de la compañía a Rolls Royce en 1931, los Bentley Boys buscaron potenciar el motor desarrollando el modelo sobrealimentado en 1929 en las instalaciones de Henry Birkin en Welwyn Garden City. La produciión total del 4½ L. alcanzó las 720 unidades (1927-31), de las cuales 55 fueron equipadas con compresor (1929-31).
El 4½ L. destacó por su victoria en las 24 Horas de Le Mans de 1928 con una unidad sin compresor y por su récord de velocidad (222,03 Km/h) en Brooklands en 1932 con una unidad con compresor.
El 4½ L. fue una evolución del 3 L., tenía en común con éste el chasis icluida la suspensión por ballestas semielípticas en las 4 ruedas y los cuatro frenos de tambor. El motor de 4 cilindros en línea fue llevado hasta los 4398 cm3 llegando la potencia a los 110 bhp para la versión de calle y a 130 bhp para la versión de competición.
Dentro de Bentley había discrepancias a cerca del modelo para competición, Barnato se decantó por desarrollar una versión de carreras del 6 Litre Town Car (el Speed Six), pero Birkin optaba por conseguir mayor potencia usando la sobrealimentación en el 4½ L.
El primer Bentley sobrealimentado fue un 3L. (FR5189) preparado en 1926 en las instalaciones de Bentley. W.O. Bentley rechazó la alimentación forzada pero Birkin continuó el desarrollo del Bentley "Blower" de manera privada financiado por Dorothy Paget. En enero de 1929 alquiló unas instalaciones en Welwyn Garden City y contrató a unos exmecánicos de Bentley y creó un equipo de cuatro Bentley con compresor, 3 preparados para Le Mans y un monoplaza especialmente pensado para Brooklands.
El gran compresor tipo Roots estaba situado fuera del vano motor por delante del radiador dando al coche una apariencia única, pero el compresor hacía que el motor tuviera un consumo elevadísimo: de 17 l/100 Km a 100 mph del modelo normal, se pasaba a los 28 l/100 Km en el modelo con compresor. Con 175 bhp las expectaciones de éxito deportivo eran elevadas, pero la fiabilidad se volvió crítica y los 4½ l Blower nunca ganaron ni las 24 horas de Le Mans ni otra gran carrera.
Al final, el gran 6½ L de W.O. Bentley fue el que conseguiría las victorias para la marca en le Mans en 1929 y 1930.
Barnato autorizó la fabricación de 50 unidades sobrealimentadas para permitir a los prototipos de Birkin cumplir con los requerimientos de calificación de Le Mans. Las ventas, sin embargo, fueron lentas y muchos de los coches fueron ensamblados por Jack Barclay, el vendedor de Bentley que compró lotes de componentes cuando los activos de Bentley Motors fueron liquidados tras la bancarrota.
* Presentación. Olympia Motor Show 1929
* 55 Uds. producidas (5 fueron prototipos de competición)
* 4 cilindros en línea en posición longitudinal delantera
* Bloque y culata de hierro fundido
* 16 válvulas, 4 válvulas por cilindro SOHC , 2 carburadores SU HVG5
* Diámetro x carrera: 9,98 x 14 cm, 4398 cm3
* Relación de compresión 5:1
* 175 hp a 3500 rpm y 240 hp a 2400 rpm (versión de competición) 201 Km/h
* Transmisión manual de 4 velocidades
* Compresor tipo Roots
* Chasis de acero de vigas 2984 mm
* Longitud: 4380 mm, ancho: 1740 mm, altura: 1600 mm, batalla: 3300 mm, vías: 1380 mm (delantera y trasera), 1931 kg