Pues resulta que en el Rally de México un tal Sebastian Oigier (protegido del patrón de Citroen) y un tal Sebastian Loeb (7 veces campeón del mundo) en el último día se jugaban el rally con una diferencia de 10 seg. para el primero.
El patrón de Citroen (Oliver Quesnel) sugiere a Loeb que no vaya a saco, que está bien el 1-2 y que se quede ahí sin atacar a su "niño" para que gane el rally.
Loeb, que tiene más galones que un general, dice que tararí....que el corre para ganar.
Ultímo día, primer tramo, Oigier sale a muerte viendo que Loeb se lo va a comer. En el kilómetro 10 se la pega y abandona.....dejando la victoria en bandeja a Loeb y Citroen sin el doblete.
Teníais que ver la cara de Quesnel en la entrega de premios....un poema.......me acuerdo de un tal Ron en Hungría.
Me parece que este año en Citroen van a pasar muuuuuuuuuuuuuuchas cosas.
